viernes, 24 de enero de 2014

"Mandela: del mito al hombre", de Justin Chadwick

Interesante y, a la vez, atrevido el último proyecto de Chadwick. El director británico presenta un film biográfico sobre la gran figura política que ha sido Nelson Mandela, pero lo hace desde un punto de vista diferente al de Invictus, la película más reciente que pesaba en el aire hasta el momento respecto al líder sudafricano. 

Uno de los carteles de la película (filmaffinity.com)
El cineasta inglés viaja a los orígenes de ese hombre que verdaderamente abandonó una posición mitificada para acercarse a lo humano. No repara en presentarnos los diferentes "Mandela" que llegan a existir: el niño, débil, indefenso y con unos aires muy marcados por la naturaleza rural del continente; el joven y primer adulto, impulsivo, fuerte en convicciones, físico y carácter, y con una mentalidad severa y firme; y por último el adulto de segunda etapa y anciano, entrañable, risueño, apacible y, sobretodo, amoroso.

La obra de Chadwick permite al espectador echar en falta un énfasis marcado en la conversión que el personaje padece en la cárcel. Esta idea no queda del todo plasmada y no se sabe muy bien en qué momento se produce el cambio de la lucha hasta el fin al amor hasta el fin. Es un aspecto que podría haberse destacado más con el soporte de otros testimonios y personajes, como el del arzobispo anglicano Desmond Tutu. Ahora bien, digna de aplauso es la apuesta del director británico por mostrar en todo momento al hombre, más que al líder, con sus errores y virtudes, sin tapujos ni vergüenzas.
Idris Elba en el papel de Mandela (labutaca.net)

A lo largo del viaje por su historia, es posible descubrir aspectos que puedan ser causa de una sorpresa negativa sobre la figura de Mandela, especialmente en su juventud y primera etapa de adulto. Pero el hecho de conocer y acercarse más a este personaje tan magnífico, lejos de sus cuatro años de legislatura o de sus hazañas político-sociales, indagando en él y su vida, es una experiencia digna de disfrutar.